Mil seiscientos años antes que Cleopatra, reinó en Egipto Hatshepsut, una mujer extraordinaria por su inteligencia y su belleza, y también por ser la primera de la historia que gobernó en un mundo dominado por los hombres.
Según la tradición secular, los faraones de Egipto solo podían reinar si se casaban con una mujer de sangre real que, mediante el matrimonio, otorgaba al hombre la condición de soberano. Tan arraigada costumbre iba a romperse por primera vez hace treinta y cinco siglos, cuando el faraón Tutmosis I dictaminó que su hija Hatshepsut, de quince años, fuera consagrada primera emperatriz de la historia de Egipto.
Hábil en la administración, audaz en la guerra y, sobre todo, entregada a su tierra y a su pueblo, la dama del Nilo supo defenderse de los celos y la insidia de sus enemigos y mantener el poder del imperio en el apogeo de su gloria.
Su azarosa vida, llena de apasionados amores y brillantes éxitos militares, nos la relata con gran realismo Pauline Gedge, autora, entre otras, de Águilas y cuervos, también publicada por Pàmies.
PRECIO 32.00 USD
Tras la conquista del emperador Claudio en el siglo I, las tribus celtas de Albión ven cómo la pax romana los despoja de sus tierras e intenta acabar con una antigua cultura cuyos rituales y ofrendas desagradan al invasor. Pueblo de artesanos y guerreros donde las mujeres combatían igual que los hombres y el honor representaba el máximo valor, los habitantes de la nueva Britania comprenden que solo la unidad les permitirá oponerse a la todopoderosa águila romana.
Liderados por Caradoc, jefe de los catuvelaunos, y con el apoyo de los druidas, custodios de la sabiduría secreta, los cuervos celtas se repliegan al oeste para iniciar la resistencia. Pero el orgullo y la pasión de los individuos inciden, una vez más, en el curso de la Historia...